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Es muy posible que su parrilla no se haya limpiado tan a fondo después de la última fiesta en el jardín.No te preocupes. Con estos consejos tu fiel compañero pronto brillará de nuevo.Primero, asegúrese de que su parrilla esté caliente cuando comience a limpiar.De esta manera, la suciedad es mucho más fácil de eliminar.Luego, es mejor utilizar uno de los muchos accesorios de barbacoa como los prácticos cepillos o el "limpiador de parrilla": una piedra pómez que hace que la limpieza sea muy fácil ¡También estamos encantados de ayudarle con algunos consejos naturales de bricolaje!
Cortar un limón por la mitad y frotar con él toda la rejilla.Déjalos en remojo durante dos horas y los restos de comida se pueden disolver fácilmente con un paño de microfibra o una esponja.Después de eso, siempre seque bien la parrilla.Durante la parrilla, el jugo de limón también es excelente para desengrasar.Pon medio limón en un tenedor y frota sobre la parrilla caliente.¡Dile adiós a los restos de grasa!Recuerde secar bien el óxido.
Calienta la parrilla con la tapa cerrada durante un cuarto de hora.Todos los restos de comida se queman a la vez.Solo tienes que frotar ligeramente y tu parrilla quedará como nueva. Recuerda utilizar nuestro cepillo de limpieza cuyo mango largo garantiza que no se queme.
Un consejo dorado (porque es mejor prevenir que curar): Engrase su parrilla con aceite vegetal antes de comenzar a asar. De esta manera, no solo evitarás los restos de comida incrustados, sino que también mantendrás la oxidación durante más tiempo.