Los colonos de Catán es un juego de mesa para toda la familia que se ha convertido en un fenómeno mundial. Desde su aparición en Alemania ha vendido más que muchos de los juegos más tradicionales.
Se trata de un juego que aúna la estrategia, la astucia y la capacidad para negociar y en el que los jugadores tratan de colonizar una isla, Catán, rica en recursos naturales. Construyendo pueblos, estableciendo rutas comerciales, etc…
Colonos de Catán ha vendido más de 2 millones de ejemplares en Europa y América. Por si esto no fuera bastante, ha sido galardonado en Alemania y Estados Unidos como Juego del Año.
Cada jugador competirá para ser el primero en alcanzar 10 puntos de victoria construyendo carreteras, asentamientos, ciudades y sumando cartas de desarrollo. Para ello, será vital recolectar y combinar los cinco tipos de recursos que ofrece la isla: madera, que se tala de los bosques; arcilla, que se produce en los cerros; lana, que se obtiene de las ovejas que hay en los pastos; cereales, que se cultivan en los sembrados y minerales, que se pican en las montañas. Los hexágonos donde se encuentran estos recursos, que forman la base del tablero, tienen asignados unos números entre el 2 y el 12 que corresponden a la combinación de resultados de una tirada de dos dados de 6 caras. Cada turno, los jugadores tirarán los dados y se determinará qué regiones producen recursos. Aquellos jugadores que tengan un asentamiento colindante a esa región, obtendrán ese recurso. Como es lógico, habrá combinaciones de números que sean más frecuentes y otras que lo serán menos, con lo cual habrá recursos que tendrán una probabilidad más baja de generarse. Si un jugador obtiene el resultado más común, el número 7, provocará el movimiento de un ladrón, que bloqueará uno de los hexágonos y robará recursos.
Además de la gestión, los jugadores tienen la posibilidad de comerciar a través de los puertos que se encuentran en los extremos de la isla o entre ellos. La negociación a menudo será la vía más efectiva para conseguir recursos escasos pero necesarios. Sin embargo, hay que calcular muy bien las ventajas y los riesgos de facilitar a un rival ese recurso tan preciado que le valga completar una carretera o mejorar a ciudad uno de sus asentamientos. El equilibrio entre gestionar bien los recursos y saber interaccionar con el resto de jugadores será el elemento clave para alzarse con la victoria.
En cada nueva partida, explorar y conquistar la isla de Catan será una experiencia distinta, ya que la ubicación de los hexágonos y de las losetas de puerto variará, así como también la posición de las combinaciones de números.
De 3 a 4 jugadores
A partir de 10 años
Unos 45 minutos de juego por partida
