Aceite seco con reflejos de nácares dorados de origen natural que procura una irresistible luminosidad dorada rosada iridiscente a todos los tipos y tonos de piel.
Hidrata, satina e ilumina en un solo gesto rostro, cuerpo y cabello. No deja un acabado graso y ofrece una hidratación prolongada. Consejos de uso: Se puede utilizar durante todo el año. Agitar antes de usar. - En el rostro, aplicar en pequeños toques con un pincel plano o con las yemas de los dedos, prestando especial atención a los puntos de luz del rostro: pómulos, puente de la nariz, frente por encima de las cejas.
- En el cuerpo, poner unas gotas en la palma de la mano y calentar el aceite entre las manos. Elige las zonas que quieras resaltar y acarícialas con movimientos suaves.
- En el cabello, aplicar unos toques en largos y puntas para sublimarlos con unos reflejos dorados.