No tóxico. Fácil de limpiar. Gran poder de absorción. Neutraliza los malos olores.
La arena cuida el medio ambiente, ya que el sílice es un material biodegradable en gran parte.
Bajo mantenimiento para la arena de tu gato, la arena de sílice es tu mejor opción.
No dejará esas molestas marcas en el suelo, ayudándote a tener limpia la zona donde tienes la bandeja sanitaria.
El sílice es un mineral no tóxico. La arena cuida el medio ambiente, ya que el sílice es un material biodegradable en gran parte.
La incorporación de este compuesto orgánico a la arena para gatos es una solución innovadora que elimina todos los problemas que generan las arenas tradicionales.
La arena de sílice tiene un gran poder de absorción, actuando como una esponja y evitando la formación de humedad en el lecho.
Solo tendrás que retirar los desechos sólidos a diario, algo que resulta muy sencillo por su textura, y la arena está lista para ser utilizada de nuevo.
A todas estas ventajas se añade que, gracias a la elevada capacidad de absorción, neutraliza los malos olores, haciendo que tu mascota se sienta más cómoda en su lecho.
Dejar una capa de arena de 3 o 4 cm de grosor.
Retirar los desechos sólidos diariamente.
Limpiar el arenero una vez al mes.
No verter los restos al inodoro, ya que puede causar el atasque de las tuberías.
RECOMENDACIONES DE USO:
Limpiar la bandeja con guantes y después lavarse las manos.
Mantener fuera del alcance de los niños.
Dejar en un lugar fresco y seco.